Puebla registró un total de 333 homicidios relacionados con actividades delictivas entre enero y mayo de este año, cifra que representa una reducción de 21 por ciento en comparación con el mismo periodo, pero de 2022 cuando hubo 423 delitos de ese tipo.
Únicamente durante el mes de mayo la entidad poblana registró 68 asesinatos de ese tipo que es la tercera cifra más alta del año después de marzo que tuvo 78 y enero con 71.
Las estadísticas corresponden al informe sobre asesinatos relacionados con actividades como el narcomenudeo, los asaltos, secuestros, ajustes entre bandas rivales, entre otros, que a diario elabora la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador mediante las secretarías de Seguridad Ciudadana, reportes de las fiscalías estatales así como registros en medios de comunicación.
El comportamiento de los casos en el transcurso del año es el siguiente: enero, con 71; febrero, con 58; marzo, con 78; abril, con 58 y mayo, con 68.
La mitad de los homicidios se concentran en siete municipios, los cuales son: Puebla, con 73; Tehuacán, con 21; San Martín Texmelucan, con 20; Tecamachalco, con 16; Chietla, con 12; Izúcar de Matamoros, con 11; Huejotzingo, con nueve y Amozoc, también con nueve casos.
Otros municipios que también destacan, son: Acatzingo, con siete; San Salvador El Verde, con siete; Tepeaca, con seis; Acajete, con seis; así como Atlixco, Palmar de Bravo y San Salvador Huixcolotla, con cinco casos, cada uno.
Entre los municipios con más casos debe resaltarse que, además de que tienen el mayor número de habitantes, algunos de ellos se localizan en la zona del “triángulo rojo” que se caracteriza por altos índices de violencia, los cuales son: Tecamachalco, Amozoc, Acatzingo, Acajete, Palmar de Bravo y Huixcolotla.
Entre los asesinatos ocurridos en el periodo de análisis, destaca el del periodista Marco Aurelio Ramírez Hernández, quien fue privado de la vida en un ataque directo en el que participaron dos personas, las cuales ya fueron identificadas por la Fiscalía General del Estado (FGE) pero hasta el momento no han sido detenidas.
Otro caso violento se suscitó el 20 de marzo cuando el conductor de una camioneta fue privado de la vida a tiros cuando circulaba sobre la autopista Puebla-Orizaba a la altura del municipio de Acatzingo, en la zona del “Triángulo Rojo”.
A principios de marzo fueron ejecutadas cuatro personas en el municipio de Tecamachalco, las cuales eran de origen colombiano y se dedicaban a hacer préstamos mediante el esquema “gota a gota”.
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