Un viaje corto desde la Ciudad de México a Puebla para cobrar un dinero terminó en una pesadilla para la familia de Mauricio Caballero Acevedo, de 44 años. El trabajador del Metro desapareció el 13 de abril tras salir de su casa en Iztapalapa rumbo a Santa Rita Tlahuapan. Desde entonces, su paradero es desconocido y las autoridades han ofrecido pocos avances.
Tras 15 días de búsqueda de su padre, Mauricio Caballero García, relató que la última vez que habló con él fue el mismo día de su desaparición. “Me dijo que ya había cobrado el dinero y que venía de regreso. Después de eso, no supimos más de él”, declaró. Aclaró que el monto no era elevado, ya que la compraventa se pactó en pagos mensuales.
Cinco días después de su desaparición, la camioneta que conducía —una Ford Explorer blanca modelo 2014— fue localizada en el poblado de Altamirano, vecino de Santa Rita Tlahuapan. El vehículo estaba abandonado y sin placas. La Fiscalía General del Estado confirmó que está bajo investigación, pero no ha detallado si fue utilizado para cometer algún delito.
El joven expresó su frustración por la lentitud del proceso y la falta de empatía institucional. “Los avances son mínimos y el trato que recibimos no corresponde a la gravedad de lo que estamos viviendo. Parece que a nadie le importa”, denunció. También pidió el apoyo de medios y ciudadanos para visibilizar el caso.
Durante la búsqueda de Mauricio, las autoridades han encontrado tres cuerpos en la zona, según contó su hijo. Agregó que sólo en Tlahuapan se han reportado cinco desapariciones en lo que va del mes. “Es aterrador lo que está pasando. La gente desaparece y nadie se inmuta”, dijo con indignación.
Caballero García hizo un llamado a la solidaridad con otras familias que atraviesan la misma situación. “Apenas llevo 15 días buscando a mi papá y ya he visto el infierno que viven tantas personas. Nadie debería pasar por esto solo”, concluyó.






