En medio de una ola de redadas migratorias en Estados Unidos, la presidenta Claudia Sheinbaum alzó la voz este fin de semana para defender a los mexicanos detenidos en ese país y exigir un trato digno para quienes migran por necesidad.
Durante su visita a Puebla, la mandataria nacional calificó como injustas las acciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), que recientemente detuvo a 35 mexicanos en operativos realizados en Los Ángeles. “Los migrantes no son criminales. Son hombres y mujeres trabajadores, que buscan una mejor vida para sus familias”, afirmó.
Sheinbaum destacó que ciudades como Nueva York y Los Ángeles “no serían lo que son” sin la fuerza laboral mexicana, y reiteró que su gobierno defenderá los derechos de los connacionales en el extranjero. Puebla, dijo, es uno de los estados con mayor presencia de migrantes en EE. UU., lo que hace aún más urgente la solidaridad institucional.
En respuesta a la situación, la presidenta instruyó al canciller Juan Ramón de la Fuente a brindar apoyo consular y legal a las personas detenidas, así como acompañamiento a sus familias en México. Subrayó que es necesario impulsar una reforma migratoria en Estados Unidos y frenar la violencia institucional contra quienes migran.
“La mayoría de ellos lleva años trabajando allá, son gente honesta. Nuestro gobierno está con ellos”, sostuvo la mandataria, quien enfatizó que su administración mantendrá como prioridad la protección de los derechos humanos de los mexicanos, sin importar su lugar de residencia.
Aunque la gira también incluyó temas de salud pública, como la inauguración de nuevas instalaciones médicas y el arranque del programa “Salud Casa por Casa”, fue su mensaje migratorio el que marcó el tono político de la jornada.
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